No compres una silla gamer sin antes leer esto

2021-10-26 02:45:43 By : Ms. Serena Kang

¿Quienes una silla gamer? Bueno, antes de comprarla necesitas saber mucho más que solo ver que parece el asiento de un auto o que tiene luces RGB. Para despejar tus dudas y ayudarte a decidir qué producto puede ayudarte a ti según tus necesidades.

Antes de comprar una silla gamer, o cualquier silla para uso de trabajo o con una función específica, tienes que tener en cuenta factores importantes como: costo, materiales de construcción, tiempo de uso, tamaño y ergonomía.

Para facilitar todo esto, vamos a dividir a los posibles usuarios en tres: uso mínimo, uso medio y uso extremo. De esta forma, podrá incluirte en uno de ellos sin ningún problema y decidir qué es lo que te conviene de acuerdo a estos lineamientos.

Al hablar de una silla “gamer” nos referimos, evidentemente, a los productos dedicados al gaming en cuestión de mobiliario. Sin embargo, aunque están dirigidas al nicho, no necesariamente quiere decir que sean la mejor opción para todos los usuarios y, menos, que sean necesarios para todos aquellos que busquen una silla para jugar videojuegos.

Asimismo, a modo de aviso, te recomiendo evitar cualquier tipo de “silla” o “asiento” jugador que no tenga materiales de construcción dedicados a la larga duración, pues solo son sillas realizadas con recubrimientos y moldes que le dan ese aspecto cuando realmente no te ayudarán a lo que deben, que es tener una mayor comodidad y un menor impacto sobre tu espalda, cóxis, y brazos a la hora de permanecer largas jornadas sentado.

Si tu uso de la silla será menor a cuatro horas tú no necesitas una silla gamer. Puedes sustituir el producto con cualquier silla de oficina que cuente con un respaldo completo. Asimismo, si eres un jugador de consola, con más razón sería un poco demasiado considerar comprar una silla de este tipo si es que juegas en un televisor a varios metros de distancia.

Sin embargo, si quisieras comprar una silla de este estilo, no deberías gastar más allá de lo básico. Un modelo simple y que no tenga demasiadas prestaciones, así como materiales de construcción dedicados a aquellas que son para jornadas aún más largas de lo regular (que son alrededor de esas cuatro horas).

Para un jugador de este estilo, que entra dentro del rango de lo casual y de las pocas horas de juego diarias, un modelo como la RSP-110 de RESPAWN puede ser una buena opción. Recuerda, ante todo, que si no requieres más de lo básico no tiene sentido alguno ir más lejos.

Una silla de jugador para las necesidades más básicas | Fuente: RESPAWN

Dentro de este rango entran, sobre todo, las personas que son parte del gaming a través de PC. Es decir, que están cerca del monitor y que dedican entre seis y ocho horas diarias a estar sentados en ellas. Para este rango sí es necesario un producto mucho más especializado que permita comodidad y, sobre todo, soporte a la espalda y las piernas, que tendrá una compresión significativa por el tiempo en esa postura.

La mayoría de las sillas de jugador entran en este rubro y están pensadas exactamente para ese tipo de usuarios. Sin embargo, los modelos y las posibilidades de compra son muchísimas y abarcan desde gamas de oficina hasta grandísimos modelos innovadores de marcas dedicadas al nicho, como Corsair, Aourus o Razer.

Aunque aquí la elección está predispuesta más que nada a tu presupuesto y gusto (entre modelos por color o integración de accesorios como bocinas o luces LED), la mejor recomendación que podemos dar en este caso es la SecretLab Titan. Sus materiales son de alta calidad y su diseño es sumamente ergonómico, lejos de todo el espectáculo que representa hacer las sillas jugador como asientos de automóviles de NFS. En esta, su diseño es sobrio y justificado, además de que brinda seguridad y soporte tanto a espalda, cuello y piernas.

La silla Titan fue galardonada como una de las mejores en 2020 | Fuente: SecretLab

Nuevamente, si lo que haces es estar sentado más de ocho horas, lo que necesitas no es precisamente una silla de jugador, sino un producto aún mucho más especializado. Para esto existen marcas y productores y diseñadores dedicados enteramente al rubro.

La ingeniería detrás de estos productos ya no está dedicada al confort y la protección de ciertas partes del cuerpo, sino a evitar, activamente, que la gente que tiene jornadas tan largas sentado tenga un desgaste físico y óseo severo.

Es decir, estas tienen un grado médico por decirlo de alguna manera. El factor principal para considerar este tipo de productos es, ante todo, el presupuesto ya que estamos hablando de sillas que en sí mismas son limitadas para su producción en masa.

Asimismo, estas son mucho más sobrias en su diseño y no escatiman recurso alguno en sus materiales de construcción que son, por regla general, de grado industrial no solo para permitir la funcionalidad sino dejar constancia de durabilidad a lo largo de los años.

Colaboración entre Herman Miller y Logitech | Fuente: Herman Miller